¡Si alguien se puede resistir a ese despliegue de delicias debería hacérselo mirar! Un sueño recurrente desde mi época de Pippi Calzaslargas es quedarme encerrada una noche en una de estas cafeterías pastelerías, picando de aquí y de allá, remojadito todo en un rico café, de esos que preparan en Portugal.
Querida Ro... es curioso que compartimos uno de los sueños recurrentes. ¿Nos habremos encontrado en algún sueño encerradas en una pasteleria en el mundo de los sueños?
Yo a esto no me puedo resistir, el dulce es mi perdicción, besos
ResponderEliminarLa que te escribe...sí se puede resistir, mis otras dos hermanas no...
ResponderEliminarPero sabes qué, en nuestro blog muchas entradas de la repostería las hago yo, porque me gusta hacerlas pero no comerlas...es una cosa de siempre.
No me puedo resitir con un escaparate de embutidos y si es de ibéricos.....ainssss
Ains, hace cuanto que no voy... por lo menos meses... (Que no vea esta foto mi catador, que luego no come)
ResponderEliminaresto es irrestible!!!!!!
ResponderEliminar¡Si alguien se puede resistir a ese despliegue de delicias debería hacérselo mirar!
ResponderEliminarUn sueño recurrente desde mi época de Pippi Calzaslargas es quedarme encerrada una noche en una de estas cafeterías pastelerías, picando de aquí y de allá, remojadito todo en un rico café, de esos que preparan en Portugal.
Querida Ro... es curioso que compartimos uno de los sueños recurrentes. ¿Nos habremos encontrado en algún sueño encerradas en una pasteleria en el mundo de los sueños?
ResponderEliminar